Creo que hoy es uno de esos días en que soy solo nostalgia. Me estaba resistiendo a escribir pero esta mañana me levante y finalmente la falta de inspiración para trabajar, las irresistibles ganas de irme a tirar al parque y este sentimiento que no me abandona desde hace días me hicieron enfrentarme al papel.
No es la primera vez que me pasa esto y aun después de tanto tiempo es inevitable no sentirse asi.¡Ah!...las despedidas. A veces parezco más fuerte de lo que realmente soy y lo que más me molesta de lo que siento hoy es que pase dos semanas quejándome de que no quería estar acá y hoy paradójicamente siento que no me quiero ir, maldita nostalgia!
Y no dejo de pensar en la imposibilidad de la cercanía y la posibilidad de la lejanía...vaya paradoja! Las cosas empiezan a darse momentos antes de partir y uno mira atrás y se pregunta cuánto tiempo perdió, cuantas cosas no hizo, cuantas cosas no miro, cuantas cosas no sintió. No me puedo culpar del todo, porque una cosa soy yo y otra cosa son las circunstancias, sin embargo ese horrible sentimiento de nostalgia no me deja en paz y a veces…a veces mis ojos se ahogan y respiro profundo, intento seguir.
Madrid, Madrid, Madrid….¿por qué está siendo tan difícil desprenderme y despegarme? ¿Por que hace una semana tenía tantas ganas de volar y hoy siento que me falta tiempo acá y que hay tantas cosas que voy a extrañar?.¿Será la magia, la sincronía y tu categoría de ciudad genérica? ¿Qué vamos a hacer tú y yo Madrid? Madrid, si no me sueltas, no podré partir...
No hay comentarios:
Publicar un comentario